E.S. E. Cap. XX MISION DE LOS ESPIRITAS.
Item 4
PROGRESO Y VIDA
Quien lance en la Tierra una
mirada ligera se espantara con ocho lustros en la retaguardia, ciertamente
verificara el progreso en que la vida planetaria va marchando aceleradamente para
un futuro mejor. Aun asi se reconocerá que las exigencias de orden espiritual
no se han alterado mucho en el curso del tiempo. El hombre de hoy dispone
hartamente de la televisión por la cual consigue, si lo desea, contemplar de
cerca las noticias de lo que ocurre en el mundo, en tano no posee bastante auto
conocimiento para analizarse de modo constructivo. Inventa computadores que
auxilian efectuando prodigios de informática y del calculo, mas aun no conoce,
en los engranajes perfectos en que se expresan las leyes de causa y efecto que
presiden su experiencia y su destino. Utiliza la energía nuclear pero todavía ignora
la extensión de los poderes del espíritu.
Realiza vuelos espaciales
aplicando los principios de la astronomía, mientras es compelido a recibir
clases de relacionamiento humano, a fin de armonizarse con los vecinos que no
concuerdan con el modo de pensar o de creer. Se vacuna contra la poliomielitis,
mas no consigue, por cuanto, inmunizarse contra los peligros del odio y del
resentimiento, de la discordia y del desespero. Disfruta de los recursos del
subsuelo, hasta incluso del propio mar, y descubre minas de nitrógeno ajeno en
los cielos que lo rodean, en tanto no sabe manejar, sino imperfectamente los
valores del alma. Comprendamos que la Humanidad actualmente efectúa proezas
admirables en todos los dominios de la naturaleza física, mas es necesario que
nuestros corazones se adapten a las leyes del bien que Jesús nos legó, de modo
de hermanarnos y respetarnos unos a los otros, sin que el ocio en la tierra nos
sea un factor desencadenante del tedio y de la delincuencia como grandeza
exterior se erguirá en soberbio palacio donde terminaremos sufriendo la disminución
del amor.
Emmanuel.
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