No pongáis la luz debajo del celemín. Mateo 5 13-16. Cap XXIV E.S.E.
ME LIBERO, ME
PERDONO
Consideremos nuevamente - desde el enfoque profundo de la psicología
espiritual- que la realidad es una ilusión, y que a cada vida,
venimos a efectuar una tarea específica.
Eso
incluye especialmente, el saldar cuentas pendientes, corregir errores,
modificar actitudes, pacificar relaciones.
Y
para ello necesito perdonar. Muchas cosas, personas, situaciones y a
nosotros mismos.
En
cada encarnación, vengo a corregir errores pasados, y aprender que cada persona
que se cruza en mi camino es un espejo que me muestra lo que profundamente se
encuentra escondido en mí y necesito corregir; cada persona que se cruza en mi
vida, es porque hay una deuda pendiente, y entonces la Justicia Divina la pone
frente a mí, como una preciosa oportunidad de compensar y solucionar lo que
tenía como deuda.
Cuando
lo logro, quedo más limpio y liviano para seguir por mi sendero de evolución.
Por
eso, necesito intensamente realizar el trabajo de perdonar muchas situaciones,
personas y también a mí mismo.
Es muy importante saber que nuestra alma elije
los padres, pareja/s hijos, etc. que necesitamos desde la energía para hacer
ese trabajo de compensación, corrección, liberación y evolución.
Solo que como es un proceso del que no tenemos noticias en la conciencia, luego vivimos quejándonos de los padres que nos tocaron, las parejas, el país, los hijos etc. sin advertir el proceso anterior. En definitiva fue mi propio espíritu quien eligió las personas y experiencias por las que pasé o tengo que pasar, justamente para aprender, transmutar y elevarme. Compenso la deuda y avanzo.
Solo que como es un proceso del que no tenemos noticias en la conciencia, luego vivimos quejándonos de los padres que nos tocaron, las parejas, el país, los hijos etc. sin advertir el proceso anterior. En definitiva fue mi propio espíritu quien eligió las personas y experiencias por las que pasé o tengo que pasar, justamente para aprender, transmutar y elevarme. Compenso la deuda y avanzo.
Si me quejo, me lamento, me victimizo, es que aún no capté ese
mecanismo. Y aún estoy en un nivel de conciencia en el que no puedo entender
profundamente ese mecanismo y hacerme cargo, hacerme responsable.
Cuando
me hago responsable, es más fácil y rápido perdonar.
Es
posible perdonar verdaderamente?
Es posible en la medida que encaremos un
trabajo que no solo contemple la mente, sino el estrato más profundo, el
espíritu, que es el que verdaderamente comanda toda nuestra vida.
Si solo trabajo en el estrato mental y
emocional, el trabajo de perdonar se hace lento, tortuoso y la mayoría de las
veces fracasa, porque solo estamos viendo la punta del iceberg.
No captamos nuestra responsabilidad en el proceso, y lo más probable es que desde el lugar del perjudicado, de víctima, pase mucho tiempo justificándome, y argumentando (desde la mente) las razones por las cuales el otro es un verdadero malvado y yo una pobre víctima de los sucesos. Pierdo tiempo, dinero, años en tratamientos y especialmente desperdicio mi preciosa vida.
No captamos nuestra responsabilidad en el proceso, y lo más probable es que desde el lugar del perjudicado, de víctima, pase mucho tiempo justificándome, y argumentando (desde la mente) las razones por las cuales el otro es un verdadero malvado y yo una pobre víctima de los sucesos. Pierdo tiempo, dinero, años en tratamientos y especialmente desperdicio mi preciosa vida.
De
lo contrario, si me abro para aprehender mi experiencia como ser espiritual,
lograré perdonar, perdonarme y reconocerme en la experiencia de espíritu
encarnado en este cuerpo físico, viviendo,
aprendiendo, corrigiéndome y aceptando que el otro que me rodea
también está en el mismo proceso. Somos parte de un Todo.
Cada uno se encuentra viviendo el mismo
proceso en su nivel espiritual. Finalmente todos tendremos que despertar algún
día. Cuanto antes lo hagamos, mayores los beneficios.
El tiempo es hoy, ahora.
Ya no hay tanto tiempo. Tenemos que enfocarnos en lo esencial y sumarnos a la tarea.
Vivimos una etapa de emergencias. Necesitamos tomar con seriedad la preparación de nuestro espíritu. Educándonos, venciéndonos a nosotros mismos, esto es la Reforma intima.
Cuanto más liviano y en Luz me encuentre, será más fácil pasar a la siguiente etapa de evolución y ayudar a otros a hacer lo propio.
No nos demoremos, lo importante no espera.
¡Muchas gracias! Sigamos expandiendo cada vez más la luz, no la escondamos mas!
El tiempo es hoy, ahora.
Ya no hay tanto tiempo. Tenemos que enfocarnos en lo esencial y sumarnos a la tarea.
Vivimos una etapa de emergencias. Necesitamos tomar con seriedad la preparación de nuestro espíritu. Educándonos, venciéndonos a nosotros mismos, esto es la Reforma intima.
Cuanto más liviano y en Luz me encuentre, será más fácil pasar a la siguiente etapa de evolución y ayudar a otros a hacer lo propio.
No nos demoremos, lo importante no espera.
¡Muchas gracias! Sigamos expandiendo cada vez más la luz, no la escondamos mas!
L.P.E
No hay comentarios:
Publicar un comentario